lunes, 29 de septiembre de 2014

“Deborah´s Theme”, de "Érase una vez... en América"

Escena del film (Deborah´s Theme)
“La música comienza donde acaba el lenguaje”, decía Ernst Amadeus Hoffmann"; y tal vez, ni siquiera es necesaria la literatura para expresar una emoción o un sentimiento; quizá, las notas musicales transmiten mejor y más profundamente el mensaje que contiene la obra que el autor quiere hacer llegar. Eso es, precisamente, lo que yo necesité hacer con mi álbum literario-musical que llamé “La música más hermosa del mundo”, porque de la música que encontré a lo largo de mi trabajo (más de 200 temas de bandas sonoras) me llevó a escribir luego el sentimiento y la emoción que la obra me inspiraba.

“Deborah´s Theme” es el primer tema del segundo volumen de este álbum musical de cine. Su autor, el prestigioso compositor de bandas sonoras Ennio Morricone. El tema, extraído de la B.S.O. de “Érase una vez… en América”, una película producida en 1984 y dirigida por Sergio Leone. El vídeo, una impresionante escena de la película con el fondo musical de esta soberbia partitura, compuesta por uno de los más grandes maestros de la música del cine.

Y es también “Deborah´s Theme”, el tema de amor del film “Once upon a time in America”, el que escuchamos y vemos en este vídeo, interpretado por el maestro Morricone, con la Sinfónica de Varsovia a la que dirige.

lunes, 22 de septiembre de 2014

"Hanover Street", de "La calle del adiós"

Cartel comercial y escena del film "La calle
del adiós"
El primer tema que inicia mi primer Volumen de “LA MÚSICA MÁS HERMOSA DEL MUNDO", del primer disco de ese álbum de 12 volúmenes, lleva el título "Hanover Street". Su compositor es John Barry y pertenece a la película "La calle del adiós".
  
He de decir que cuando incluí este tema, iniciando la recopilación, de alguna forma estaba haciendo homenaje a un nostálgico "boulevard del adiós" y a unas escenas parecidas a esas secuencias con las que se inicia el vídeo con el tema musical.
  
Lo cierto es que, con la publicación de esta “obertura” musical de cine, ahora en este blog reservado exclusivamente para sugerir en él un mensaje con el que he envuelvo las bandas sonoras que elegí, aprovecho para dedicar este espacio, muy especialmente, a aquellos amigos que pertenecieron a un selecto y mágico club, y que yo llamé "Amigos con alma sensible", porque era a ellos a quien les ofrecí cada años, en una fecha muy especial, cada uno de los volúmenes temáticos del álbum musical.

"La calle del adíos" es una película del año 1979, dirigida por Peter Hyams y protagonizada por Harrison Ford y Lesley-Ann Down. En cuanto su banda sonora, John Barry consigue con las últimas notas de su tema principal un momento sublime en la coda final, para ensalzar aún más la conclusión romántica de la historia.
  
Y "Hanover Street" es otra versión del tema de "La calle del adiós", esta vez interpretado a piano, porque, aprovechando que se trata de un vídeo homenaje a Lesley-Ann Down, el personaje protagonista del film, también y de alguna forma, para mí, es otro homenaje al personaje que yo imaginé a través de todos los volúmenes del álbum.
  
También quiero dedicar este blog a quienes aman la belleza de las palabras que sugieren la buena música, y muy especialmente la del cine.

Introducción de "La música más hermosa del mundo"

"La música hermosa es noble, fiel, generosa e
incondicional"
Hace años, cuando decidí publicar mi primera crónica sobre "La música más hermosa del mundo" en mi blog "Rusty Andecor", decía en su introducción: "No hay mejor compañía que la del amigo noble y fiel, generoso e incondicional", como esa buena música que nos gusta escuchar en los mejores momentos y que nos parece tan hermosa. Y es que la música hermosa es noble, porque está exenta del artificio de la vulgaridad y de lo soez, y -por el contrario- está acorde con la grandeza de las emociones más sublimes. Además, la música hermosa es fiel, porque la existencia de su inspiración y la permanencia de su recuerdo es capaz de mantenerse junto a tu soledad, tu desconsuelo, tu dolor o tus miserias, sin resquicio de defraudar o abandonarte. La música hermosa es generosa porque te agasaja con la virtud de su armonía, con la excelencia de su melodía y con la bondad de su sensibilidad. Y la música hermosa es incondicional, porque jamás te pide nada a cambio, no se ofende por tu falta de atención a ella, ni te reprocha porque dejes de escucharla o la olvides. Por eso la música es la mejor compañía, y por eso si tienes un amigo, que reúna estas cuatro virtudes, guárdalo como el mayor tesoro y trata de conservarlo entre todo lo que más aprecies.
-
Pero hay algo, incluso, mejor; y es tener ese buen y mejor amigo, y una hermosa música como esa 
compañía noble, fiel, generosa e incondicional, como cómplice de una amistad.
-
"La música más hermosa del mundo" no es una recopilación pretenciosa de los mejores temas o de los más célebres de la música del cine,  aunque  aparentemente  eso es lo que
El mensaje de la música nos la inspira, a veces, la musa de
nuestra imaginación, y se convierte, entonces, en una pintura
de colores fantásticos y de imágenes mágicas.
yo conseguí estos últimos años con mi trabajo. Pues, aunque mi intención fue escoger el estilo y la expresión musical de algunos compositores de bandas sonoras, desde su inspiración, por alguna temática o historia llevada al cine, no excluí la posibilidad de que también esa misma inspiración musical sintonizara con la ilusión de otra acontecida, tal vez, en la fantasía que recreara mi mente ensoñadora. 
"La música más hermosa del mundo", en sus primeros volúmenes, es un poema sinfónico lleno de mensajes “ocultos dentro de la música”, intensamente emotivos; son mensajes que al principio no describo, como lo hago en los siguientes volúmenes y para cada uno de los temas, porque prefiero inundar la imaginación, exclusivamente, con la elocuencia y la intensidad de esos temas musicales que componen el inicio de la obra, y porque ,en donde oculto el relato, prefiero "decorar" esa fantasía que bulle en el pensamiento de los que escuchamos la música, mientras buscamos, casi inconscientemente, el argumento que más se parece a nuestra experiencia.

Y así como Horacio decía: "La pintura es un poema sin palabras", yo pienso que "La música es un poema sin palabras y sin imágenes, porque ambas están en la ilusión de nuestro corazón". Y creo que podemos encontrar, dentro de las notas de ese poema
"Si Dios quisiera revelar su existencia con un signo, que fuera
perceptible por nuestros sentidos, crearía la más hermosa
de las sinfonías para hacérnosla escucha" (Rusty Andecor)
musical, igual que en los primeros álbumes de esta obra… 
ilusión y magia.
-
Stravinski decía "No basta con oír la música; además hay que verla"; dándonos a entender que, para comprender su esencia y su mensaje, hay que hacer un esfuerzo con nuestra imaginación o, tal vez, dejarse llevar por ella, y haciendo un viaje con nuestra sensibilidad a ese mundo mágico de la ilusión.
-
Pero, además, la música que se contiene en la totalidad de los temas de este álbum, lleva impregnada, según se mire, la fascinación del personaje de un lejano, pero mágico universo, ese que suele aparecer en los cuentos que yo mismo solía escribir hace años e, incluso, que se dejaban entrever en mis primeras reflexiones. Tal vez fue para esa etérea musa, para la que fue escogida y dedicada toda mi recopilación, y -al mismo tiempo- para hacer un homenaje a la historia de... una, también, 
"hermosa amistad", noble y honesta, que el desvarío o el delirio de mi imaginación, romántica y bohemia, quiso retratar antes en un breve cuento que escribí una vez.
  
Una cuestión práctica, para la funcionalidad de las visitas a las entradas de este blog, es el acceso a los vídeos que recogen los temas musicales. Los enlaces para la reproducción de dichos vídeos se activan haciendo click en los títulos que resaltan el cambio de color o de su tono en el texto de la entrada.