sábado, 16 de mayo de 2015

"Anette" / "The Pink Panther" / "Amelie" / "Amarcord" / "Habana" / "Noite e Luar" / "Mon amant de Saint-Jean"

La inspiración se produce a través de una luz cercana que ilumina
nuestra mente y estimula la imaginación. Pero es el entusiasmo,
también, el que consigue la perfección de la obra de arte, y es
el entusiasmo, el que mueve a la emoción a quien la contempla.
"La música da alma al universo, alas a la mente, vuelos a la imaginación, consuelo a la tristeza, y vida y alegría a todas las cosas"
(Platón)
  
"La música es la pintura invisible que vemos en el lienzo de nuestra imaginación y que percibimos con los ojos del alma. Son las notas y los acordes que escuchamos, los que impregnan los colores y las formas plasmados en el cuadro en que se representa la obra musical".
(Rusty Andecor).

Robert Schumann dijo: "Nada bien hecho se puede lograr en una obra de arte sin entusiasmo" y "Enviar luz al corazón del hombre, ese es el deber de un artista".

Por ello, y como dice Rusty Andecor: "La música debe estar creada con entusiasmo y la luz de su obra debe llegar a quien la escucha, para que éste también se sienta inspirado y entusiasmado por su significado".

Hay una poesía musical que procede de la sutileza y la magia de
ese escenario oculto que envuelve la melodía que, a veces, nos
parece llegar desde el piano que interpreta ese hada de los
sueños, que no es más que... la "dama del vestido blanco" .
"La música más hermosa del mundo", en toda la amplitud de su obra musical, la que estuve escogiendo para mi colección de música del cine y con la dedicación de cada uno de sus "playlists", de sus álbumes y libretos, fue la que describí a lo largo de mi crónica y sus capítulos hasta ahora publicados. Es en esta segunda vuelta y en la revisión de los temas de cada volumen, en donde me voy a detener para comprobar aquellos de mi mayor interés musical y que entonces omití. Esa música merece ahora incluirse, destacando también el significado que "su mensaje ha podido transmitirle al autor".


René, un acordeonista callejero de París, que solía tocar en el "Pont
des Arts" el vals de Anette. Es una foto que hizo hace muchos años
mi amigo Bernard y, casualmente, vino a parar a mi  
Lo cierto es que, después de haberme sumergido en los secretos del contenido argumental de toda esa poesía musical que yo percibía en los dos primeros volúmenes, y en la sugerencia del escenario oculto de sus temas, es en este "tercer volumen" en el que dejo discurrir, tal vez, la continuación de un libreto a modo de cuento y que se inicia en ese simbólico tema, que es el que da color y carácter a la toda obra musical; el que yo titulé "Encuentro en el Sena", originalmente el vals de "Anette", aunque mi amigo Bernard (precisamente, el hermano de Sophie) me contó que según le dijo un accordéoniste amigo suyo, llamado René, la pieza era conocida como "La valse de la dame du Pont". Fue en la publicación del capítulo que dediqué a la música del "Café de París", en el que incluía ya el vídeo con el tema y en el que hice referencia a su origen musical. (Clic en todos los títulos que aparecen en el post para reproducir el vídeo con los temas musicales de referencia).

Recuerdo, cuando solía obsequiar a mis amigos con alma sensible, cada año aquel nostálgico CD, que el "tercer volumen" llegó a ser, tal vez, el más apreciado de todos. Algo tuvo que ver, supongo, el significado "encubierto" de aquel "Encuentro en el Sena" y la interpretación que muchos de mis amigos hicieron de su música. Algo tuvo que ver, estoy seguro, pues en la sucesión del resto de los volúmenes siempre se hacía una referencia a ese tema, que terminó convirtiéndose en la "marca" de "La música más hermosa del mundo".

"Anette" se tocaba al acordeón, como un vals, en los bares y cafés
cercanos a la orilla del Sena, evocando los desventurados amores
de aquella dama del Sena y su trágico final en las aguas del río.
Así pues, "Encuentro en el Sena" (Anette) es el tema de amor del álbum, en su obra completa. Y en su momento, cuando edité aquel volumen y su libreto en 2006, lo describí como "una explosión gratificante, gozosa y conmovedora de un instante, tras el encuentro de dos amantes en un lugar de París y en el enclave del Sena". Había algo más en su significado, pero fue en el cuento que luego también publicaría, "La dama del Sena y el viejo poeta", en el que construiría toda su leyenda, la de una dama errante en las cercanías del Sena, la vieja fábula del lugar y la de una dama "imaginada" extraída de la fantasía del autor. Hay que decir que la pieza grabada en el vídeo editado corresponde a un tema que grabó una orquesta y arreglador para acordeón, pero cuyo acordeonista, apenas conocido, era Jan Holland. Como curiosidad, "Anette" era una vieja historia de amor que llegó a popularizarse en la radio noruega en los años 30 y que interpretaba Rita Drangsholt, pero que se convirtió después en un "lied"  que la misma Marlene Dietrich llegó a cantar. Sin embargo, fue Margot Hielscher, una conocida actriz y cantante de la época de la II Guerra Mundial, la que dio a conocer la canción "Anette" (clic), en los teatros y cabarets de lujo de Berlín, ya en los últimos años de la gran contienda, hasta el punto que su fama llegó al París ocupado como una canción triste que terminó cantándose en los bares y cafés cercanos al Sena, refiriéndose a una muchacha francesa llamada Anette y a su desgraciado amor con un alemán. Años después, fueron los bohemios acordeonistas, como René, que tocaban en las orillas del Sena y en sus puentes, los que corrieron la leyenda de aquella "dama del Sena" que, según se dice, terminó en las profundidades de sus aguas, para después encantar, con su hechizo y atributos de sirena, a los amantes infortunados que se acercaban al "Pont des Arts", lugar desde donde aquella "dama" decidió abrazarse a la imagen de que vio reflejada en las oscuras aguas del río.

Hay un orden de los temas musicales incluidos en el volumen, hasta 24, los que componen ese pequeño libreto al que hacía referencia en mi crónica. He escogido de ellos los que más destacaron en mis preferencias, no solo las bandas sonoras procedentes de sus filmes, sino los temas que por motivos afectivos, a causa del mensaje que me aportaron, más llegaron a inspirarme.


Una música de acordeón orquestada, a través del tema "Cortina",
describe la continuación de un encuentro tranquilo y feliz, en una
escena en la que se percibe la brisa de ese bello atardecer.
Temas como "Cortina", de Henry Mancini, de la BSO de "The Pink Panther", y que describí como "la continuación del regocijo de aquel encuentro, tal vez más sosegado y relajado, y en el que casi se percibe la sensación de la brisa del atardecer del tranquilo Sena, a través de un crucero nocturno por el río". O el "Love theme", de la misma BSO, también de Mancini, y por la que, a través del piano y la cuerda, "recrea una escena serena y apacible en la que dos amantes se retiran... para saborear, tal vez, la elocuencia de su silencio y la complicidad de su sonrisa".
  
Temas como "La noyee" y "La Valse des Vieux Os", ambos de Yann Tiersen, que pertenecen a la BSO de "Amelie", película de culto, una comedia llevada al cine en forma de cuento. En el libreto y para el primer tema, describí entonces, de lo que me sugirió su música, "una manifestación de sentimientos de alegría y de gozo, cuando tras ese festejo se confirmaría la complacencia de una decisión". (Festejo que se describía en el tema 4 "The Wedding" del volumen). En cuanto al segundo track: "es una escena en la que, a través de un vals que interpreta un acordeón, se representa a dos enamorados que se complacen en la nostalgia de unos recuerdos vividos en el pasado, para culminar en un feliz acontecimiento".
  
Amelie. Una producción francesa de Jean-Pierre Jeunet, estrenada en 2001, protagonizada por Audrey Tautou, una actriz icono del cine francés. Su banda sonora se debe a Yann Tiersen.
  
"Amarcord" es otro de los films que representa el carácter de este "tercer volumen" de "la Colección". La fluidez y la elocuencia del trabajo musical de Nino Rota, el compositor de otra de las obras maestras del cine, sirve aquí para continuar con el argumento del libreto de este álbum. Amarcord, una producción italiana de 1973, obra maestra del cine, dirigida por Federico Fellini. Se incluyen tres de sus temas:
  
The Wedding describe la escena de la celebración de un compromiso
que más tarde celebran los temas "Lo noyee" y "La Valse des Vieux
Os", después de aquel "Encuentro en el Sena" con... Anette.
En "The Wedding" se escenifica aquí "la celebración de una promesa, o tal vez, simplemente, el acuerdo complaciente, eufórico, de la cercanía tangible de un abrazo y la complicidad de dos sonrisas".
  
En "Main Theme" (versión interpretada al piano por Nino Rota), "la música nos deleita haciéndonos un recorrido a través de todos los momentos vividos por quienes protagonizan subrepticiamente el relato musical, desde su encuentro, recordándonos el momento de la celebración de su promesa, hasta el instante en que el piano y unos violines les llevan a la magia de la dimensión en la que todo gira alrededor de esa ilusión que ellos conocen muy bien".
  
Y en "Gradisca e il Principe", otro de los tracks de este film y del tercer volumen, "se recupera la melodía que sirve de tema a la celebración del frustrado compromiso sentimental, ejecutando unas pinceladas tan sutiles como, musicalmente, aterciopeladas. Parte de ellas, son la descripción del desánimo y la tristeza que siente el fiel enamorado, cuando acompañado de su propia soledad, se dirige, sin darse cuenta, nuevamente al Sena".

Hay algo más en todo ese fascinante mensaje que me transmite la banda sonora de "Amarcord". Y creo que son, en parte, "Las improvisaciones de los temas de Amarcord", que interpreta el pianista sueco de origen ruso Roland Pöntinen. Tengo la impresión de que toda esa parte de "mi película", en la que se reúne un encuentro, la feliz celebración, la desilusión y una despedida, se encuentra en esta maravillosa pieza del compositor Pöntinen.
  
Estephanie Valentin, interpretando "Mon amant de Saint-Jean", un
vals muy significativo que describe algunas escenas del libreto.
"Mon amant de Saint-Jean" es una vieja canción francesa del año 42 que se cantaba en forma de vals musette. Francois Truffaut la incluyó en su película "Le derniére metro". La versión más conocida fue la de Patrick Bruel, aunque para mi gusto, la más próxima a la sugerencia de la música que se describe en el "Café de París", el álbum que ya hemos visto, es la "Mon amant de Saint-Jean", de la violinista Stephanie Valentin. Sin embargo, es el "Mon amant de Saint-Jean" orquestado por André Rieu, la versión que, subtitulada en mi crónica como "Vals en un Café de París", describe esta escena: "La música de un acordeón se oye desde lejos. Sus sones, teñidos, tal vez, por cierta nostalgia, seguidos muy pronto de la melodía de un violín que interpreta las mismas notas casi con tristeza, como si ambos quisieran expresar que algo penoso se avecina. Pero aún así, el vals sigue envolviendo a los dos enamorados en un ambiente despreocupado y tranquilo. Ahora es ya la orquesta la que acompaña la escena. Pero más tarde y en algunos momentos, la música se va haciendo más suave, más delicada, hasta encontrar un tono melancólico, hasta que al final vuelve a oírse aquel acordeón lejano que abrió al principio la melodía. Quizá es el momento del drama, porque... alguien aparece de improviso".
  
Emotiva escena de "Habana", en la que se produce la despedida, quizá
parecida a la de los personajes que representa el relato del libreto y
cuyo mensaje transmiten los dos temas del film.
En el "Love Theme", de Dave Grusin, de la BSO de "Habana", "la flauta que inicia la melodía, nos hace ver la entrada en escena de ese nuevo personaje (del que se hacía referencia en el tema anterior). La música de violines, las notas de un arpa y de la un piano, después, continúan dibujando un poema teñido de tristeza que se convierte en un dramático fragmento musical, cuando nos describe aquella despedida entre los dos amantes y el momento en que él se aleja hasta perderse entre la multitud"
  
En otro lugar del tiempo, de la historia oculta entre el libreto del álbum, el tema "Cuba libre. Se fue", de Dave Grusin, de la misma BSO de Habana, "describe el triste viaje de él, cuando persigue la búsqueda de su destino para unirse con ella. El pasaje musical viene a ser como un epílogo. Y quizá... ¿porqué no? ...es la culminación de un deseo por el que reclamaban volverse a encontrar en aquel lugar; él con su amada".
  
Hay una soledad amarga que nos aguarda en algunos momentos de la
vida, cuando sufrimos el olvido, el desencanto, la traición, o la rutina
de quien hemos amado. Es el momento en que solo nos queda tomar
ese tren en el que vemos, allá en su interior, la luz de la ilusión.
Habana es una producción norteamericana, realizada en 1990 por Sydney Pollack y protagonizada por Robert Redford y Lena Olin. Lo cierto es que fue una película injustamente tratada en su día por la crítica, a pesar de sus grandes valores artísticos, de un extraordinario guión basado en la grave situación de Cuba en 1958 y su revolución en el 59. Realmente, lo más importante para mí fue el mensaje que aportó la historia de los dos personajes del film. Y no es más que una anécdota, pero lo cierto es que "Habana" es una de mis 12 películas favoritas.
  
Finalmente, dos versiones del tema "Noite e Luar", perteneciente a la BSO del film "Manuale d´amore", sobre partitura del músico gallego Carlos Núñez, escenifican dos secuencias de este particular libreto. El tema "Noite e Luar" (versión piano y acordeón), "describe, a través de la música nostálgica de ese piano, cómo la dama de este relato se aleja acompañada de su viejo e irrenunciable destino, el que aparece inesperadamente. Las notas, ya conocidas del acordeón, las del clarinete después y la fuerza del conjunto orquestado dan mas énfasis al sentimiento del personaje de él, que sufre el momento en que ella termina alejándose. Hay también unas notas suaves y muy tenues del piano, al final del tema, que quieren transmitir cómo ella ya ha desaparecido".
  
Patrizia Laquidara pone sentimiento y voz a ese amoroso mensaje
que transmite la canción "Noite e Luar".
En cuanto a la otra versión del tema "Noite e Luar""describe la soledad del amante, cuando se da cuenta de que su dama ya no está con él y que se ha marchado con el improvisado visitante. Es el clarinete quien protagoniza ese drama, y es el piano y la cuerda, después, los que acompañan al desconsolado personaje en su soledad".
  
Nos queda la canción del film, "Noite e Luar", la que interpreta Patrizia Laquidara, la siciliana que puso sentimiento y voz a un mensaje: "Noche de luna, yo quería cantar al amor. Deja la decepción y la decepción que llevas dentro, piensa solo en nosotros y vamos a cantar. Yo quería saber cómo era la vida sin ti a mi lado. Todo era tan frío y entonces apareciste tú, cerca de mi. Así que deja el dolor, todo va a suceder. Necesito el perdón, déjalo todo. Tengo besos en la mano, yo te quiero para mi".


Ángel González "Rusty Andecor"